Copa Menstrual: Mis primeras impresiones

13 de agosto de 2015
Recuerdo haber visto por primera vez la copa menstrual a finales del 2014 en las redes sociales, su forma me recordaba a las peras de goma para sacar mocos de los bebés, eso no es para mí, pensé. Después, gracias a un grupo feminista de apoyo a la educación menstrual en mi ciudad, del que he platicado anteriormente (*), empecé a considerar la copa por sus beneficios socioambientales, económicos y en el autoconocimiento -sobre los cuales prometo desarrolar próximas entradas-.

En una de las reuniones tuve la oportunidad de ver las copas en vivo, tocarlas y escuchar la experiencia de otras personas, posteriormente dediqué varias noches a ver vídeos y leer sobre recomendaciones de uso, y cuando estaba decidida a comprarla EvaCup México me manda un mensaje dónde me ofrecía una copa a cambio de compartir mi experiencia. La noticia me alegró muchísimo. Hasta ahora, he tenido la oportunidad de usarla por 3 períodos, y puedo adelantarles que estoy encantada.

Esta es mi copa, talla chica, color rosa e incluye una funda protectora muy linda.
¡Existe en otros colores!

Aquí voy a darles bastantes detalles, no se vayan a espantar ¿Vale? Empezaré por compartirles un poco sobre mi menstruación en general: Soy regular, debido a que uso pastillas anticonceptivas mis períodos llegan el día esperado, tienen una duración estable de 4 días, mi flujo solo es abundante el primer día, el segundo y tercero moderado, el cuarto es escaso y básicamente son coágulos. Antes de usar la copa mi dinámica era la siguiente:
  • Primer día: "Gracias" a los cólicos puedo calcular en que momento del día será el primer sangrado, lo espero con una toalla sanitaria para flujo moderado, una vez que me baja utilizó tampones para flujo moderado-abundante y por las noches uso toalla sanitaria con alas.
  • Segundo día: Utilizo mis tampones flujo moderado-abundante las primeras 12 horas, después no los necesito pues mi flujo disminuye bastante y no lo saturan. Las siguientes 12 horas utilizo tampones para flujo escaso. Toalla sanitaria por la noche.
  • Tercer día: Tampones para flujo escaso durante el día, toalla sanitaria por la noche.
  • Cuarto día: Pantiprotectores, varios, durante todo el día, en ocasiones también el quinto día.
Cada mes tenía que asegurarme de tener cuatro productos distintos: Tampones para flujo moderado/abundante, tampones para flujo escaso, toalla sanitarias para las noches y pantiprotectores para los últimos días. Y a pesar de que periodos no son muy abundantes, siempre, siempre sucedía que en algún momento el tampon fugaba o por las noches me manchaba mi ropa de cama o las pijamas.  

EvaCup México me pregunta: ¿Cuál copa te mando? Y con esto empezamos mi serie de impresiones.

1. Elegir la copa a tu medida


EvaCup maneja, al igual que otras marcas, solo 2 medidas de copas menstruales: Adiós al dilema de elegir productos en base a su absorbencia, por su material, o por sus olores (¿Manzanilla, áloe vera?), decidir entre tampon o toalla sanitaria. Con la copa solo necesitas saber que medida escoger y la podrás utilizar en los próximos 10 a 15 años. La principal recomendación para elegir tu talla es tu edad y si has o no tenido hijos, tu flujo no importa.  La medida chica se recomienda a menores de 30 años y que no han tenido hijos, la medida grande para mayores de 30 años y que ya han tenido hijos, tanto por vía vaginal como cesárea. Yo elegí la medida chica, y en color rosa.


2. Doblar la copa y sentirte experta en origami


A pesar de que la medida de una copa esta hecha para adaptarse perfectamente a tu vagina, el tamaño puede abrumarte: Las medidas de mi copa es de 5cm de largo (similar a un tampon) y 4cm de diámetro. La buena noticia es que esos 4cm de diámetros los puedes reducir bastante gracias a que están hechas de un material sumamente flexible. En múltiples sitios leí, y reitero: La clave para insertarla al primer intento, sin dolor y sin incomodidades es: Lubricarse, relajarse y doblarla de la manera que *tú* prefieras. 


En mi primer día de menstruación, decidí insertarla mientras me duchaba, en la comodidad de la regadera, sin miedo a manchar alguna superficie, y con el agua corriendo, doble la copa como el esquema de abajo, la idea es lograr mantener esa forma con una sola mano. Respiré profundo, separé un poco mis piernas, con mi mano libre separé mis labios menores, sentí la entrada a mi vagina, con la otra mano dirigí la copa ligeramente hacia atrás, y voilá! Estaba dentro y no la sentía: La había insertado correctamente a la primera.

Según las recomendaciones, debí esperar unas 12 horas para retirarla y vaciar su contenido, pero estaba tan nerviosa que el primer día saque la copa y la inserté varias veces al día, entre los nervios y movilizaciones llegué a no ponerla correctamente, pero respiraba profundo y la movía un poco y listo. Ahora esa paranoia ha desaparecido y aun que en ocasiones no tengo la suerte de colocarla correctamente al primer intento, cada vez se vuelve más fácil. 


Esta es la forma que prefiero yo, se reduce el diámetro casi a la mitad.



3. Lubricar

Agua, lubricantes a base de agua, saliva... ¿Lagrimas?
La primera vez que use la copa quise tomar todas las precauciones y lubriqué la copa con agua. La mayoría de las marcas de copas sugieren lubricar solo con agua o si acaso, con lubricantes a base de agua, debido a que otro tipo de lubricantes pueden degradar el material de la copa. He leído que algunas personas usan su propia saliva para lubricar la entrada vaginal o la copa misma, no me parece mala idea, especialmente si consideras debes lavarte las manos *siempre* que manipulas la copa. Por mi parte, se ha convertido en un habito humedecer la copa antes de insertarla, pero en nuestro periodo estamos naturalmente lubricadas y puede que no lo encuentres necesario. 



4. Sentadillas


Parece broma, pero este movimiento es perfecto para asegurarte que esta bien colocada la copa.

Nunca pensé que hacer sentadillas mientras menstruaba pudiese ser tan gratificante. Durante mi consulta previa al uso de la copa, algunas personas recomedaban hacer sentadillas para acomodar bien la copa; lo hice las primeras veces y lo continúo haciendo: Una vez dentro, hago un par de sentadillas, y si no me molesta -o mejor dicho-, si no la siento siquiera, significa que esta bien colocada. 



5. Afuera, sin miedo


Este es el mayor temor con la copa: No esta hecha de un material absorbente como los tampones o toallas, así que tememos al derrame. ¿Sabes cuántos mililitros de sangre menstruas? Gracias a mis clases de ginecología, sabía que, en promedio, menstruamos de 25 a 80ml en todo nuestro periodo, personas con flujo abundante pueden ir desde los 60ml a 120ml.  Las copas tienen una capacidad hasta para 25ml (chica) o 30ml (grande).

¿Hacemos cuentas? Imagínemos que tienes un flujo de sangrado moderado, fijándolo en 70ml en 5 días. En tu primer día sangrás el mayor porcentaje, dígamos unos 30ml, el segundo 20ml, tercero 10ml y entre el cuarto y quinto día el resto de 10ml. Si tú, como yo, no has tenido hijos y eres menor de 30 años, serás copa talla chica con unc capacidad de 25ml, la cual puedes usar hasta por 12 horas continuas. 

Con estos cuentas números en mente: Si sangro en mis primeras 24hrs un aproximado de 30ml, y la copa puede contener hasta 25ml en 12hrs, significa que en 12hrs recolectará aproximadamente 15ml, por lo que no puede llenarse hasta el tope
Y en efecto, aun que tenía en mente las cuentas, quedé impresionada en lo "poco" que se llenaba la copa incluso los primeros días de sangrado. 

Como ya he repetido, el primer día la saqué varias veces, pero ya en mi segundo y tercer uso, la dejé sus respectivas 12 horas dentro: Nunca se lleno hasta el tope, ni siquiera a la mitad, y gracias al tiempo transcurrido, al retirarla, ya esta su mayor parte coagulada y los sedimientos hasta el fondo, es muy poca la cantidad de material líquido realmente.

Eliminando ese temor a una copa rebosante de sangre, esta el hecho de sacarla con la suficiente gracia para no ensuciarlo todo. La copa tiene una puntita con relieve que ayuda a tomarla bien entre los dedos. Yo suelo pujar un poco o hacer media sentadilla mientras separa con otra mano mis labios menores, y así con los dedos índice y pulgar de mi mano libre puedo tomar perfectamente la copa. La copa hace vacío, entonces es necesario presionar un poco el fondo de la misma para poder sacarla suavemente. 
Yo nunca he tenido un derrame, pero puede suceder las primeras veces, es cosa de practica y hacerlo sin prisas. Si es tu primera vez y estas muy nerviosa, el momento perfecto sería durante tu ducha.


6. Limpieza 

F-á-c-i-l
Esta indicada lavar la copa antes de usarla por primera vez en cada ciclo con agua y jabón suave, y hervirla por un período entre 5 a 10 minutos. Ya en tu periodo solo necesitas vaciarla en el retrete (o ducha), y lavarla en el lavamanos con agua y jabón, eliminando bien calquier residuo de jabón. No te toma más de 3 minutos. Solo he tenido la necesidad de sacar y lavar mi copa en lugares públicos, procuro vaciarla bien, ponerme bastantes capas de papel entre mi cuerpo y mis pantaletas, eliminar con papel cualquier resto de sangrado de la copa, y, sin pena, dirigirme al lavabo a limpiarla. Si esto te pudiese poner incómoda, carga con toallitas húmedas para bebé, o bien una botella de agua para enjuagarla sin salir del retrete.

7. Nos vemos el próximo ciclo!

Yass for the cup!

A pesar de los nervios y un poco de torpeza, la primera vez usando la copa fue suficiente para quedarme con ella, por que:


  1. Puedo tenerla por 10-12 horas, sin sentirla, sin miedo a derrames, pasar todo el día en el trabajo y retirarla mientras tomo la ducha antes de dormir.
  2. Puedo dormir con ella, sin temor a infecciones, a manchar mi ropa de cama o que se pierda dentro de mí (a diferencia de los tampones), puedo decirle adiós a esos casi-pañales que son las toallas sanitarias nocturnas.
  3. Fajar/Curtir/Liarse/Jotear  con ella es súper cómodo. Dependiendo mi libido suelo ser activa incluso en mi período, pero admito que aveces es complicado estar en pleno calentamiento sexual y tener que interrumpir el momento para ir al servicio y retirar la toalla, o temer que tu pareja jale el tampon sin querer... Con la copa te olvidas de eso. Claro, si deseas penetración necesitas retirarla!
  4. No más mal olor: Con tampones y toallas sanitarias la menstruación puede adquirir cierto olor, generalmente es sútil pero huele, con la copa te olvidas de ello. 
  5. No necesito toallas o tampones de repuesto en mi bolso.
  6. En comparación del tampon, incluso evacuar es cómodo. A todas las que han usado tampon y necesitas evacuar, al pujar es común que el tampon salga un poco y puede ser doloroso cambiarlo especialmente si el tampon estaba poco húmedo. Leí en algunos testimonios que al pujar a algunas personas se les ha desacomodado la copa y es necesario re-acomodarla, pero nunca se sale, debido a la presión negativa. 
  7. Además tiene muchos beneficios socioeconómicos y ecológicos que me hacen sentir responsable. 

¿Te animas a probarla?
Espera más entradas al respecto de la Copa Menstrual donde espero aclarar todas tus dudas.

1 comentario:

  1. Disculpa mi ignorancia, pero no hay ningun problema con la copa al orinar? Sabes cuanto cuesta una?

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